21 jun 2010

Preguntas al flamante Secrario General de la IMM Sr. Ricardo Prato



Información publicada en La Diaria en su edición del viernes 18-6:

 
Local cartonero suspendido:
Desde hace un par de días circula por la red una denuncia de la gente de La Propia Cartonera que plantea la injusticia de la clausura del bar Clase A, ubicado en Santa Lucía 5265. En ese local funcionaba el taller donde escolares realizaban las tapas de los libros de la editorial y también era el lugar elegido para hacer los lanzamientos de textos. Hace un mes, por ejemplo, estuvo allí el argentino César Aira presentando el relato Mil gotas. Hace cinco días fue clausurado por la Intendencia de Montevideo (IM).
Desde la intendencia se admite que el trámite adolecía de algunos problemas internos y que se tomó como responsable del local a la persona encargada de otro local también clausurado. Para Ricardo Prato, director del servicio central de inspección general de la IM,  los inspectores municipales concurrieron al local dos veces luego de recibir denuncias por ruidos molestos de los vecinos de la zona tramitadas en la Junta Local 14. Según Prato, se encontraron con “un pool, una borrachería y una rocola”, y no con un centro cultural. El jerarca también recordó que aún corre el plazo legal para recurrir la clausura y que, de nombrarse un nuevo responsable, se puede pedir una nueva habilitación del local.
Prato también dijo no tener conocimiento del pedido de habilitación del local, que los responsables de la cartonera aseguran estar tramitando desde mayo de este año, pero que no pudieron completar por dificultades económicas.”


Señor Prato:
1-     “se encontraron con un pool, una borrachería y una rocola, y no con un centro cultural”. ¿Qué entiende usted por centro cultural? ¿Qué entiende usted por Cultura?
2-     ¿En qué sentido y con qué razones descarta la posibilidad de que un lugar donde hay un pool, una rocola y unos borrachos, pueda ser un centro de actividades culturales y barriales?
3-     ¿De algún modo está diciendo que los bares no pueden representar lugares de actividad cultural?
4-     ¿Cuánto midieron, en decibeles, las sucesivas inspecciones por ruidos molestos al Clase A? Preguntamos esto porque a nosotros nunca se nos ha notificado formalmente.
5-     ¿Por qué no menciona que cada vez que fuimos advertidos por ruidos molestos y se nos sugirió que se bajara el volumen de la música, nosotros respondimos afirmativamente, de manera que en las últimas semanas no se escuchaba la música a más de veinte metros de distancia?
6-     ¿No tiene conocimiento del pedido de habilitación? En realidad eso es porque nunca la comenzamos a tramitar. Considerando lo viciada de ilegalidad que está la clausura, no estamos dispuestos a negociar la habilitación con el bar cerrado. Este pedido de prórroga está descansando desde mayo en un escritorio del Centro Comunal 14, puede consultarlo a través de la página web de la intendencia, ingresando el número de expediente 3360-013226-09.
7-     ¿Así que la resolución de clausura “adolecía de algunos problemas internos”? ¿Los problemas que nos inventaron y que nunca probaron son tan graves que se nos clausura el local,  pero la falta de legalidad para moverse que tuvo la intendencia es solo “adolecer de algunos problemas internos”?

Usted ha sido recientemente nombrado como Secretario General de la Intendencia de Montevideo. No sólo nos interesa a nosotros contar con respuestas claras a estas preguntas planteadas por el hecho de estar involucrados en este suceso lamentable. También nos interesa saber qué piensa el futuro Secretario General de nuestro gobierno departamental sobre determinadas cuestiones relativas a la cultura y la descentralización, que seguramente tenga mucho más para aportar que estas paupérrimas declaraciones. 
Esperando una pronta respuesta



Clase A
La Propia Cartonera

Ayudanos a recuperar nuestro Taller


Si estás a favor de la reapertura del Centro Social Clase A, donde funciona la Editorial La Propia Cartonera, enviá esta imagen petitorio a la siguiente dirección informacion@cultura.imm.gub.uy , con el asunto: "explicaciones por el cierre del Clase A".

La idea es que lleguen varios mails con el mismo formato, no solo como gesto de solidaridad, sino también demandando información clara del cierre de este espacio que nos pertenece y en el que se generan actividades culturales, desde Nuevo París, con vecinos del barrio y en cual trabajamos y realizamos encuentros desde hace poco más de un año.


MANDAR ESTE MAIL NO CUESTA NADA, Y PARA NOSOTROS, ES UN GESTO QUE VALE MUCHO.

17 jun 2010

Clausura del taller de La Propia por parte de la IMM

El Centro Social Clase A, ubicado en Santa Lucía 5265 esquina Faramiñán, desde 2008 ha significado para el barrio no solo como un lugar de esparcimiento nocturno sino un centro de referencia para proyectos sociales y culturales de la zona.

Dentro de esos proyectos se encuentra La Propia Cartonera, editorial popular y comunitaria, que desarrolla sus tareas diarias en el local mencionado. En este proyecto participan alrededor de 20 personas, desde adultos a niños, desde clasificadores de residuos a escritores, artistas plásticos y editores. El objetivo fundamental es generar libros a precio accesible para que la comunidad pueda acceder a ellos más allá de su situación económica. Por otro lado se intenta la contención de niños en situación de vulnerabilidad y la formación de cooperativas de trabajo con recicladores de residuos.


Paralelamente al trabajo diario, La Propia ha realizado presentaciones de libros en el Clase A, donde los propios escritores pueden dialogar con los vecinos, y la comunidad puede conocer e interactuar con los artistas.


Además de la editorial, se han realizado en el lugar Peñas folclóricas y recientemente una murga joven comenzó a ensayar ahí.


El día de 12 de junio la Intendencia Municipal de Montevideo resolvió clausurar el local del Clase A, ejecutando la resolución número 440/09/1000, fechada el 15 de setiembre de 2009 y firmada por el Secretario General Alejandro Zavala. La misma responde a un expediente número 3400-002484-08, supuestamente elevado por la Mesa de convivencia y Seguridad Ciudadana.


Tanto esta resolución, como el accionar de la Mesa y de la Intendencia, carecen de sentido común y caen en groseros atropellos.


En primer lugar se plantea que la Intendencia decide clausurar, por diversas denuncias los dos bares propiedad de la unipersonal Mónica Beatriz Caraballo, ubicados en Faramiñán 705 y en Santa Lucía 5265. La señora Caraballo es ex mujer del responsable del Clase A, con el cual no tiene trato desde el año 2008, la misma era dueña del bar de la calle Faramiñán, pero no tuvo nunca responsabilidad en el bar de la calle Santa Lucía, más que por el hecho de que uno de los responsables de éste había sido su pareja. Ni en el contrato de alquiler del inmueble, ni en los recibos de luz, agua, impuestos aparece el nombre de Caraballo, y quienes conocen realmente la situación saben que los dos bares no tenían más relación que el hecho de estar a una cuadra de distancia.


El bar de la calle Faramiñán tuvo denuncias de todo tipo y en diversos allanamientos realizados por la fuerza pública, se hallaron pruebas que confirmaban algunas de las mismas. También han sucedido incidentes diversos, algunos de los cuales resultaron graves. Ninguno de estos incidentes, ni de los ilícitos que en ese lugar acontecían tienen relación alguna con el Clase A, con quien coexistieron unos meses hasta que el bar de Faramiñán fue clausurado.


Según ha trascendido las denuncias de la Mesa de Convivencia y Seguridad Ciudadana contra el Clase A, tratan de ruidos molestos, incidentes varios, tráfico de drogas y juego clandestino. La diferencia es que mientras en el bar de Faramiñán las denuncias fueron puestas a prueba a través de diversos allanamientos y mediciones, en ningún momento la fuerza pública o autoridades de la Intendencia de Montevideo concurrieron al local para realizar allanamiento en busca de drogas o juego clandestino, ni midieron si el ruido de la música excedía las normas vigentes. Con respecto a los incidentes, desde que abrió sus puertas en el año 2008, se ha sufrido solo un incidente en la órbita del Clase A y fue en el mes de octubre de ese mismo año, por gente que estaba a más de media cuadra del local. Después de eso, ha funcionado un año y medio sin ningún tipo de inconveniente, algo que pueden afirmar quienes han concurrido en ese lapso, no solo vecinos sino quienes de otros barrios han participado de los eventos organizados por La Propia.


Aunque también somos vecinos de Nuevo París, la Mesa jamás nos invitó a dialogar para realizarnos este planteo y escuchar nuestra posición. Incluso hasta ahora, no sabemos quienes forman esta Mesa ni cuando se reúnen. Tampoco han concurrido a las actividades de La Propia ni al Clase A por cualquier otro motivo. Es decir que un grupo de vecinos, que nadie sabe quienes son, ni donde ni cuando se reúnen, sin ninguna prueba legal ni conocimiento de causa, presentan denuncias infundadas con total impunidad. Lo grave no es solo eso, sino que la Intendencia Municipal de Montevideo, ejecute una clausura en base a la denuncia infundada presentada por un grupúsculo de vecinos, quienes proceden con una falta total de diálogo y por fuera de la ley.


Lo único, de todos los motivos de la clausura, que no carece de legalidad, es la falta de habilitaciones correspondientes del local en cuanto a lo comercial. Como nuestra vocación, a diferencia de la de los otros implicados en este problema, es la de actuar de acuerdo a las leyes, hemos planteado nuestra intención de iniciar la habilitaciones, las cuales no hemos podido realizarlas aún por cuestiones meramente económicas. Esta intención está expresada en nuestro pedido de prórroga a la Intendencia, en la cual planteábamos la necesidad de encontrar la solución a la irregularidad sin necesidad de que el establecimiento cierre. Nuestra solicitud está ingresada el día 31 de mayo con el número de expediente 3360-013226-09.


Es decir que la Intendencia clausura, casi un año después, a instancias de una mesa de vecinos que actúa con total impunidad y de espaldas a la ley, un centro barrial en el que se realizan actividades culturales desde hace un año. El cual considera además, como bajo la responsabilidad de una persona ajena al emprendimiento, sin ningún tipo de prueba.


Ante este atropello basado en el rumor y el anonimato, nosotros exigimos nuestros derechos y no eludimos nuestras obligaciones como ciudadanos. No tenemos nada que esconder, tenemos mucho para dialogar, pero siempre en la órbita del estado de derecho que integramos y al que defendemos a pesar de que algunos lo ignoren.


Centro Social Clase A

La Propia Cartonera